Existen varios estudiantes con necesidades especiales que, frecuentemente, han pasado inadvertidos en las escuelas, aquellos son: los estudiantes superdotados y talentosos.

Según la Organización Mundial de la Salud, hay entre ochocientos mil y un millón de niños superdotados en nuestro país. Sin embargo, a varios de ellos no se les ha diagnosticado con alguna habilidad especial, al contrario, algunos de ellos los llegan a señalar como alumnos con hiperactividad, problemas de conducta, baja autoestima, retraimiento, asperger, entre otras. Hasta un 93% de los niños superdotados pueden ser confundidos o mal diagnosticados. Por lo tanto, no tienen la oportunidad de recibir estimulación y educación acorde a sus capacidades.

La OMS considera que para ser catalogado como una persona superdotada se necesita un cociente intelectual de igual o mayor a 130.

La sobredotación intelectual, según el Dr. Francoys Gagné, es definida como: “posesión y uso de capacidades naturales, que no son entrenadas sistemáticamente, y que son expresadas espontáneamente en el dominio intelectual.”

Algunas características de estudiantes superdotados son:

1. Motivación alta por aprender: saber práctico y saber teórico.
2. Creatividad: habilidad para encontrar nuevas formas de hacer las cosas.
3. Disincronía: la edad mental no coincide con su edad cronológica.
4. Hiperactividad: múltiples trabajos y diversiones.
5. Madurez mental temprana: comportamiento responsable y autónomo antes que la mayoría.
6. Rapidez en el aprendizaje: comprender antes que la mayoría o ser autodidactas.
7. Hipersensibilidad: gran sensibilidad al mundo que los rodea.
8. Decisiones rotundas: gran persistencia en lo que se decide hacer.
9. Perfeccionismo: insatisfacción fuerte ante el trabajo inacabado o si no sale como se desea.

Los métodos de enseñanza para estudiantes superdotados deberían motivar el pensamiento abstracto, la creatividad, la lectura de alto nivel. Sin embargo, un aspecto que no se toma en cuenta, y que es de suma importancia, es la integración, conocimiento y la estabilidad de las emociones.

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Bibliografía: Carrillo, I. (2010). Niños Superdotados ¿hay lugar para los listos? Newsweek. Padrón, I. (2004). Nueve Especiales Necesidades Educativas de los niños Superdotados. Woolfolk, A. (2010). Psicología Educativa. México: Pearson.